
Los progenitores que reciben por primera vez el diagnóstico de un hijo/a puede influir de manera importante en la función y dinámica familiar, en muchas ocasiones esto puede suponer nuevos retos y desafíos en el papel de cuidador y en la búsqueda de apoyos como recursos para soporte del desarrollo del niño/a, conllevando en algunos momentos en la crianza un alto ritmo de vida. Es por este motivo que el Mindfulness ha surgido como una nueva herramienta de ayuda en los procesos de regulación emocional y en la reducción de estrés para cualquier tipo de persona.
Diferentes autores definen el Mindfulness como un estado de atención a lo que sucede en nuestro alrededor, siempre en el presente evadiendo pensar en el futuro o pasado, teniendo presente tres acciones: la energía, la claridad de los pensamientos y la regulación emocional.
Los efectos del Mindfulness:
Dentro de la psicología, el Mindfulness busca focalizar nuestra atención en aquello que estamos realizando o sintiendo para poder ser conscientes de lo que sucede en nuestro alrededor tanto a nivel fisiológico como conductual. Trasladado al ámbito familiar en personas con diversidad funcional, los progenitores o cuidadores pueden potenciar estos elementos mediante la concentración, la relajación y productividad, obteniendo beneficios en su estilo de vida, para así afrontar situaciones difíciles durante la crianza.
Diversos estudios muestran una fuerte relación de mejora entre la dinámica familiar y los progenitores después de una intervención con programas de Mindfulness, mostrando muchos cambios significativos en:
Teniendo en cuenta que la crianza de un hijo con diversidad funcional abarca grandes desafíos y un alto nivel de implicación dentro del entorno familiar, el Mindfulness puede aportar un efecto de retroalimentación entre cuidador e hijo/a dando una mayor estabilidad emocional y conductual entre ambos.
Para desarrollar la práctica en Mindfulness existen diferentes programas dirigidos por profesionales como terapeutas y psicólogos especializados en el desarrollo del bienestar humano, hay distintas formas para realizar los programas, uno de ellos es de manera vivencial ya sea individual o en grupo, también existen series de televisión como el “guía Headspace” y aplicaciones para dispositivos móviles que ayudan en situaciones puntuales de la persona a reducir los niveles de ansiedad y estrés.
Además de ser un gran recurso para el bienestar de muchas familias, la práctica del mindfulness está dirigida a todo el público, por ejemplo, trabajadores que estén bajo mucha presión laboral, estudiantes en época de exámenes o simplemente en aquellas personas que deseen empezar en la práctica de la meditación.
Vanessa Lizeth Vargas, equipo de Psicología de Dependentia